El Ministerio de Salud informó que monitorea la palta peruana tras denuncias en redes sociales por presunta contaminación con cadmio. Hasta ahora no hay notificación formal, pero se fortaleció la vigilancia sobre importaciones identificadas.
La alerta se centra exclusivamente en ciertos lotes de origen Perú, no en toda la palta que circula en el mercado. De acuerdo con el Minsal, la verificación se realiza a través de las redes del Sistema Internacional de Alertas Alimentarias para determinar si existen lotes específicos que deban ser retenidos o retirados. A la fecha, no se han recibido avisos oficiales, por lo que no hay una lista pública de partidas afectadas.
Medios peruanos reportan que en 2024 se rechazaron seis envíos en Europa por presencia de cadmio en palta Hass de Perú y que a junio de 2025, con un 35% de la campaña, ya suman 11 rechazos por el mismo motivo.
Exportadores de ese país reconocen el problema en ciertas zonas y aseguran que están adoptando medidas de mitigación. Estos antecedentes no implican que toda la palta peruana esté contaminada, pero sí justifican la vigilancia focalizada.
El jefe del Departamento de Nutrición y Alimentos del Minsal, Cristián Cofré, explicó que se intensificó el control sobre las importaciones “identificadas” que podrían ingresar al país. Además, la autoridad trabaja en una actualización de la regulación sanitaria que “prontamente estará oficializada”, con el fin de precisar límites y procedimientos frente a contaminantes como el cadmio.
El Ministerio de Agricultura precisó que el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) no realiza controles de inocuidad a productos hortofrutícolas al momento de la importación ni en el comercio interno. Por tanto, la verificación de riesgos químicos como el cadmio recae en salud pública, tanto en el punto de ingreso como en vigilancia en mercado cuando corresponde.
El cadmio es un metal presente en la naturaleza y en procesos industriales. Las vías de exposición más comunes son el tabaco y ciertos alimentos. Puede acumularse en el riñón, causar daño renal y ha sido asociado a algunos tipos de cáncer. Por tratarse de un contaminante químico, lavar o pelar no lo elimina si está incorporado en la pulpa; la gestión del riesgo depende del control por lotes y de acciones regulatorias.